El Sueño

Narcolepsia

Escrito por Rosa Anwandter
La narcolepsia es un trastorno neurológico que influye en el sueño. Es un problema crónico que afecta al sistema nervioso central. De acuerdo con investigaciones científicas, ya se sabe que en este trastorno del sueño hay una incidencia importante de factores genéticos. El síntoma más revelador de la narcolepsia es el estar con sueño durante todo el día no obstante la persona haber dormido toda la noche. Un paciente con narcolepsia puede estar con sueño o quedarse dormido cuando está interactuando en situaciones o momentos inadecuados para ello. De repente pueden surgir ataques de sueño absolutamente incontrolables. Otra de las características es que en un mismo día pueden sobrevenir varios episodios y el estado de letargo puede ser prolongado. Durante la noche el sueño acostumbra a no ser reparador debido a que la persona está despertando constantemente. La sintomatología de la narcolepsia más frecuente es la somnolencia excesiva durante las horas de vigilia. Sin embargo, cada individuo puede presentar diferente sintomatología. Lo más común es que el paciente se encuentre con somnolencia exagerada durante el día y con deseos irresistibles de dormir en cualquier momento. También está presente la pérdida repentina del control muscular ( Cataplejía) que se puede manifestar desde una leve fatiga hasta colapsar completamente. En algunos casos se presenta la Parálisis del Sueño que es la incapacidad de hablar o hacer movimientos durante más o menos sesenta segundos, al quedarse dormido o al despertar. En ciertos casos puede surgir la Conducta Automática, que es un síntoma secundario o auxiliar, que se caracteriza porque la persona realiza acciones de forma robotizada sin saberlo y frecuentemente no recuerda lo que hizo. En algunos casos se presentan Alucinaciones Hipnágogicas, que son imágenes y sonidos muy reales que surgen cuando la persona va a quedarse dormida, lo que provoca mucho miedo. Otros síntomas secundarios o auxiliares son: Sueño nocturno interrumpido, con varios períodos de vigilia. Sensación de fatiga intensa y falta de energía constante. Depresión. Dificultad de memorizar y de concentración. . Dificultad para enfocar bien con la vista. Sensación de hambre que hace ingerir alimentos descontroladamente. Fatiga en las piernas y manos Problemas de alcoholismo. Depresión. La narcolepsia se diagnostica por medio de un examen y estudiando la historia clínica del paciente. Para un buen diagnostico de la narcolepsia generalmente se le pide al paciente algunos exámenes de laboratorio para confirmar el diagnóstico y planificar el tratamiento Estes pueden incluir: Polisomnografía nocturna. Examen de Latencia Múltiple del Sueño para controlar cuando surge el sueño y la rapidez en que entra en la fase REM Examen genético de sangre para medir ciertos antígenos que suelen encontrarse en las personas con predisposición a la narcolepsia. La narcolepsia tiene tratamiento específico y éste será determinado por el médico tratante, basándose en los siguientes factores del paciente; edad, estado general, historia médica, en que etapa se encuentra la dolencia, así como también la tolerancia a ciertos medicamentos u otras terapias.. El objetivo del tratamiento de la narcolepsia es que el paciente permanezca el mayor tiempo despierto durante el día para que así disminuyan los episodios recurrentes de cataplejía utilizando el mínimo de medicamentos posibles. La somnolencia excesiva durante el día y la cataplejía se tratan de manera separada. Se acostumbra prescribir dormir por períodos cortos dos a tres veces al día. También se aconseja tener una alimentación adecuada y hacer ejercicios regularmente. La narcolepsia es una enfermedad que debe ser tratada necesariamente por un médico especialista.