Con la facilidad y rapidez con que actualmente es posible desplazarse por vía aérea de un lugar a otro del planeta, ha surgido un nuevo trastorno del sueño, llamado en inglés “jet lag”.
Durante muchos años la creencia era que éste era un problema emocional, sin embargo existen numerosas investigaciones científicas donde se ha demostrado que esta situación es causada por un desequilibrio en nuestro reloj biológico natural, debido al cambio brusco de husos horarios.
El cuerpo humano funciona dentro de un ciclo de 24 horas, denominado “ritmos circadianos”
Estos ritmos son medidos por el alza o baja de la temperatura corporal, los niveles de plasma de algunas hormonas y de otras condiciones biológicas.
Es bien importante saber que la hora de dormirse o bien el horario de estar en vigilia va a ser determinado por el tiempo que uno se expone a la luz diurna .
Cuando se viaja hacia otro huso horario el organismo demora para adaptarse a otro ritmo circadiano. Es común durante los primeros días del viaje sentir somnolencia en las primeras horas de la tarde y también suele suceder estar desvelado en la madrugada.
Esto es el trastorno del sueño o “jet lag”. Este problema se presenta al viajar a lugares distantes ya que el cuerpo es más lento para adaptarse a los nuevos ritmos circadianos que a los ya establecidos por el propio organismo.
Sugerencias para disminuir los efectos del "Jet Lag"
- Elija un vuelo que le permita llegar a su destino en las primeras horas de la tarde y trate de no quedarse dormido antes de las 22 horas, horario local.
- Si siente necesidad de dormir una siesta, duerma en las primeras horas de la tarde y que ésta no se prolongue por más de dos horas. Para despertar ponga un despertador.
- Varios días antes de su viaje, anticipe el cambio de sus ritmos circadianos, levantándose y acostándose más temprano que lo habitual.
- Si usted viaja hacia el occidente adelante sus ciclos levantándose más temprano y más tarde si es hacia el oriente.
- Luego que el avión despegue, ponga el reloj a la hora de su lugar de destino.
- Evite alcohol, cafeína y bebidas cola.
- Después de llegar a su destino evite comidas pesadas.
- Evite ejercicios extenuantes.
- En su hábitat provisorio, trate de aislarse de los ruidos y mantenga su habitación en la más absoluta oscuridad.
- Trate de exponerse a la luz diurna, ya que está comprobado que la luz solar es un poderoso estimulante en el proceso de regulación del reloj biológico.
- El tipo de alimentos que se ingiera no tiene influencia en disminuir el “Jet Lag”.
- Cualquier duda o información más detallada sobre estas pautas, consulte a su médico.